El precio mayorista de la electricidad sigue escalando con fuerza. Este miércoles alcanzará un nuevo máximo anual al situarse en los 74,58 euros por megavatio hora (MWh), apenas una semana después de rozar los 71 euros. El precio de la luz no subía tanto desde el pasado 6 de diciembre de 2017, cuando se situó en 75,70 euros, según datos del operador del mercado ibérico, Omie.
Esto puede ser un aviso para cuando llegue el invierno ya que, tan solo en agosto (entre el 1 y el 30), el precio de la luz subió un 24% más que en el mismo mes de 2017, pasando de 51,6 a 64,2 euros por megavatio hora.
De seguir esta tendencia al alza en los próximos meses, tal como apuntan los mercados de futuro, 2018 sería el segundo año, tan solo por detrás de 2008 (64,4 euros), con el precio medio del mercado eléctrico más caro desde 1998.
El encarecimiento del recibo responde a la subida de los precios eléctricos mayoristas, que suponen en torno al 35% de la factura, ya que los costes regulados, que fija el Gobierno, llevan años congelados.
Sin embargo, los expertos coinciden: la llave para frenar esta espiral alcista del precio de la electricidad la tiene el Ejecutivo. Según Mírian Díaz, de Facua, “lo que tiene que hacer el Gobierno es entrar en el oligopolio de las eléctricas, fijar precios que sean justos y bajar los impuestos, porque en realidad el 27% de nuestra factura son tasas”.
Encarecimiento de los combustibles
El comportamiento del mercado eléctrico mayorista se debe a un conjunto de razones, entre ellas, la menor aportación de la generación eólica e hidráulica. El periodo estival conlleva una caída en la producción de renovables que, en el caso de la eólica, ha sido inferior a la media, lo que ha abocado a recurrir a la generación térmica para la cobertura de la demanda, siendo su coste la principal referencia de precio del mercado.
A este factor se une el encarecimiento este verano de los combustibles -gas y carbón- y de los derechos de emisión de CO2.
Además, las altas temperaturas en Francia y la indisponibilidad de parte de su capacidad nuclear han presionado al alza los precios en España, al pasar la interconexión de sentido importador a exportador.
La hora más cara, las nueve de la noche
La hora más cara este miércoles será las 21:00 horas cuando el mercado mayorista, también conocido como ‘pool’, alcanzará los 79,33 euros por MWh. Por su parte, las horas más baratas se han situado en la franja entre las 03:00 y las 06:00 horas, siendo a las 05:00 horas la más baja del día, con 68 euros por MWh.
Por su parte, la demanda prevista para este miércoles asciende a 690 gigavatios hora (GWh), según datos de Omie.
Entre enero y agosto de este ejercicio, el recibo de la luz suma un importe de 548,75 euros para el consumidor, frente a los 543,59 euros que tuvo que destinar en los ocho primeros meses de 2017, lo que supone ya más cinco de euros.
No obstante, este encarecimiento en el recibo de la luz no se traslada por igual a todos los consumidores, ya que cerca del 60% de los usuarios en España están en el mercado libre y tienen garantizado el precio de la energía durante al menos un año, lo que evita el posible impacto de las variaciones del precio de la electricidad.
Por el contrario, cerca del 40% de los consumidores están acogidos a la tarifa regulada, denominada PVPC y sujeta a la evolución del mercado mayorista. En este caso, los usuarios sí se verán afectados por la subidas.
