Meteorología y Feria del Libro son un tándem inseparable y cuenta la intrahistoria que siempre algún día de lluvia cae en Madrid. Pero este viernes la cita con la literatura ha arrancado casi veraniega: con sol de justicia y los primeros abanicos en El Retiro.
La reina Letizia ha inaugurado la 78 edición de la Feria que abre hasta el 16 de junio. Frente al desangelado arranque del pasado año, cuando el viento y las tormentas obligaron a desalojar casetas y el mal tiempo frenó levemente las ventas. Esta vez solo esperan que lluevan las cifras.
“Si el tiempo nos respeta y las temperaturas están cómo hoy, por el tipo de oferta que hemos diseñado calculamos que estaremos en torno a los 10 millones de euros de facturación. Eso significaría 550.000 ejemplares vendidos. Tenemos muy buenas perspectivas”, augura Manuel Gil, director de la Feria del Libro.
La vorágine se centrará en más de 300 expositores donde estamparán su firma y charlarán con el público unos 1.700 autores, entre ellos: Luis Landero, la poeta y fenómeno editorial Elvira Sastre, Camila Lackberg o Ian Gibson
5.000 actividades y un marcado sabor iberoamericano: encuentros con sellos independientes, impulso a los planes de lectura e intercambio de ideas a ambos lados del Atlántico sobre el futuro de las pequeñas librerías, en el alero frente a los gigantes online. Son otras de la ofertas de estas dos semanas.
Merengue y bachata acompañan al desembarco de República Dominicana
República Dominicana es el país invitado. Desembarca con 60 narradores, cine, artes escénicas y mucha música: merengue y bachata resonarán en El Retiro.
La literatura emergente del país caribeño es otra joya a descubrir con jóvenes autores como Alejandro Gonzales o Elisabeth Balaguer. Con “una prosa de profundidad y una poesía de sentimiento increíble. Muchos están sin publicar en España”, explican desde la organización.
“Habrá conciertos porque el merengue es patrimonio inmaterial de la Unesco y pesa mucho en el PIB del país. Queremos romper la simetría sobre la realidad iberoamericana, ellos nos conocen a nosotros mejor que nosotros a ellos”, añade Manuel Gil, mientras el colorido grupo de merengue Perico Ripiao baila y vuelan los “Fríos fríos”: un granizado típico dominicano que se ha repartido entre los primeros visitantes. Muy ad hoc para los calores madrileños
Entre los que curioseaban entre las casetas había muchos estudiantes. La feria es territorio de colegios e institutos entre semana y esta edición también se consagra a los jóvenes: lectores, creadores e ‘influencers’ que se reunirán en un nuevo pabellón.
“Queremos romper un poco el mito de que los jóvenes a determinada edad dejan de leer. Habrá booktubers, instagramers, novela gráfica, manga y todo con chavales que están prescribiendo libros en internet y las redes”, señala el director a RTVE.es.
Según las encuestas internas de la Feria, el pasado año la visitaron 600.000 jóvenes menores de 25 años. Un nicho de mercado donde están Alba y María, de 17 años, que se han acercado en busca de novela y poesía”. “Me encanta porque me identifico y veo reflejados mis sentimientos”, apunta Alba. Poesía y juventud es otro de los duos imbatibles de 2019.
Unos metros más allá vuelan los Futbolísimos (SM) de Roberto Santiago. Un fenómeno de misterio, amistad, personalidades diversas y mucho fútbol que arrasa entre los más vendidos de literatura infantil y juvenil. Las infantas Leonor y Sofía también son seguidoras y la reina Letizia se ha llevado el último ejemplar publicado de la serie que suma quince títulos.
También ha causado sensación El pollo Pepe, un clásico entre los más pequeños. Este tierno y colorido pop up, de un pollito y su mamá gallina, celebra su 20 aniversario en El Retiro.
“Han llegado hoy los primeros niños y por lo primero que han preguntado es por El pollo Pepe. Y los profesores diciendo: pero si yo hace 20 años enseñaba con este cuento” que suma 24 ediciones”, cuenta Marta Novo, directora general de SM España.
La maternidad, de otra manera
La Feria del Libro seguirá siendo feminista o no será. El colectivo Mujeres del Libro, al que ahora se suma la asociación Clásicas y Modernas y la iniciativa Efeminismo, multiplican sus actividades. Ya abrieron brecha el pasado año con éxito a través de mesas redondas en las que se reflexiona sobre la conciliación y la visibilidad de la mujer en el sector editorial.
Y un dato que apuntala. Según un informe de la organización, el 65% de los visitantes en 2018 fueron lectoras y esperan que las autoras de esta edición rebasen el 40%. Un interés que entronca con el boom de las publicaciones feministas que continúa con buena salud.
“Se siguen reeditando muchos clásicos como El segundo sexo de Simone de Beauvoir que se agota. Interesan mucho los libros sobre la maternidad pero que muestran la otra cara de lo confusas y diversas que pueden ser las experiencias. Por ejemplo, está Madres arrepentidas de Orna Donath (Reservoir Books)”, cita Miren Elorduy de la librería feminista Mujeres & Compañía (caseta 80).
Esta cita también quiere ser más “verde y sostenible” con actividades en torno a conjugar dos ecosistemas: el del parque madrileño y el de la mejor literatura. En cualquier caso, Pío Baroja, Elvira Lindo o Valle-Inclán les darían la misma receta para escapar de la ciudad: un buen libro y elegir un banco en el Parque del Retiro.
