A gusto de Kamala Harris, la reescritura de su historia y perfil por parte de los entregados medios de la izquierda no está siendo suficientemente diligente ni rápida. Por lo tanto, ha decidido que es mejor reescribir ella misma los titulares y mantener la cabecera que escribió el artículo original para dar credibilidad a su historia. Unas modificaciones de las que los medios afectados nunca fueron informados ni se les pidió autorización para proceder. Para ello, la campaña de la vicepresidente ha utilizado anuncios de pago de google, como se puede ver en la web del gigante tecnológico Ads Transparency Center.
La voz de alarma surgió de un medio poco sospechoso de simpatizar con Donald Trump como es Axios. En la noche del martes, el periódico denunció que “la campaña de Harris ha estado editando titulares de noticias y descripciones dentro de los anuncios de búsqueda de Google para que parezca que The Guardian, Reuters, CBS News y otros grandes editores la respaldan“.
Anuncios engañosos que no violan las políticas de Google
A pesar de que el gigante tecnológico asegura que el equipo de Kamala no viola sus políticas comerciales, lo cierto es que genera confusión, provocando que la gente de por hecho que el titular promocionado es el que el autor del artículo en cuestión estableció desde el inicio. Como se puede observar en la imagen, es cierto que se aprecia claramente que es un contenido pagado por la campaña de la vicepresidente, aunque el enlace es el de la plataforma de noticias en la que el artículo apareció originalmente.
Malestar entre los medios afectados
Desde Axios contactaron con varios de los afectados, que subrayaron que nadie de la campaña de Kamala se había puesto en contacto con ellos. Algunos, notablemente molestos, como The Guardian, a través de un portavoz, anunciaron que se pondrían en contacto con Google para obtener más información:
“Aunque entendemos por qué una organización puede desear alinearse con la marca de confianza de The Guardian, necesitamos asegurarnos de que se utiliza de forma adecuada y con nuestro permiso. Nos pondremos en contacto con Google para obtener más información sobre esta práctica”.
Un portavoz de Google subrayó que está claro que se trata de anuncios de pago, con la etiqueta “sponsored” destacada sobre ellos: “A los anunciantes electorales se les exige que completen un proceso de verificación de identidad y nosotros mostramos de forma destacada en los anuncios información que indica claramente quién ha pagado por el anuncio“.
Además, la tecnológica apuntó que han detectado un fallo técnico en su biblioteca de anuncios que provocó que algunos anuncios aparecieran sin la información necesaria que Google exige cuando se publican. Un portavoz de la compañía aseguró que están investigando los sucedido.
Estrategia publicitaria o desinformación
No obstante, Axios recordó que “en el pasado, las plataformas se han preguntado si este tipo de formato puede difundir desinformación“. Como contrapunto, Facebook bloqueó ya en 2017 cualquier posibilidad de que un anunciante pudiera editar los textos de enlaces a noticias de Instant Article en sus contenidos comerciales como parte de su política de “continuos esfuerzos para detener la propagación de desinformación y noticias falsas”.
Fuentes cercanas a la campaña de Kamala, por su parte, aseguraron que contratan anuncios para que aparezcan en una posición destacada en las búsquedas en los que incluyen enlaces a noticias reales a las que añaden más contexto a los votantes que buscan información sobre la vicepresidenta Harris.
Una visita a los anuncios pagados publicados en Google por la campaña de Donald Trump permite comprobar que no es una práctica que el expresidente esté utilizando.